Reseña: Gabriel García Márquez, “NOTICIA DE UN SECUETRO”. Grupo Editorial Norma. Publicación en 1996.
Gabriel García Márquez, escritor y periodista colombiano nacido en Aracataca en 1928, se caracteriza como un escritor sin fronteras, porque se ha desempeñado en todos los campos de la escritura: crónicas, ensayos, novelas, cuentos etc. En 1982 es condecorado con el premio Nóbel de Literatura por su libro “Cien años de soledad”, donde se refleja el realismo mágico demarcado en cada una de sus obras.
‘Gabo’, como le dicen muchos, mezcla los espacios sin dejar perder el realismo de cada historia, presenta uno, casi perfecto de la cotidianidad de una cultura determinada hilándolo continuamente con el de su propia imaginación.
“NOTICIA DE UN SECUESTRO” se diferencia de las demás obras en el sentido de que en éste, la trascendencia no gira alrededor del realismo mágico, sino se caracteriza por ser un escrito netamente periodístico de una época de violencia en Colombia.
Esta obra, es la unión de reportajes de cada victima y afectados, dónde la crueldad está presente en cada página, la violencia no cesa y donde recordamos una realidad olvidada que se identifica principalmente con nosotros los periodistas, por ser ellos las principales victimas.
Es placentero situarse en cada momento, por medio la descripción empleada nos acercamos al hecho, no sé si todos, pero uno como lector recrea lo narrado en la imaginación, un sueño despierto de una realidad leída palabra por palabra, ejemplo perfecto cuando imaginamos el orificio de la bala que perfora la espalda de Diana Turbay.
Igualmente, por medio de la experiencia de este escritor logra crear opinión pública respecto a un hecho real, relata las dos caras de la situación sin apoyar cualquier posición o precisar quien es el bueno y quien el malo sino, dejando sólo al lector en el camino de formar una crítica y sus propias conclusiones.
Así, analizamos a Gabriel García Márquez en dos caras diferentes, la de periodista y la de literato, el énfasis de cada obra puede irse por una corriente determinada. Pero en sí, se puede concluir que realmente estas dos están unidas, cada obra dónde él desea pintar una realidad, necesita de una investigación y observación previa que todo periodista posee.